Cómo las decisiones de Trump están afectando el prestigio de EE.UU. en el escenario mundial

El concepto de "poder blando", introducido en 1990 por el académico Joseph Nye, describe la habilidad de influir en otros por medio de la atracción y la persuasión, en lugar de la coacción o incentivos económicos. Este enfoque ha sido clave para la proyección de poder de Estados Unidos mucho antes de su definición formal. Explica por qué EE.UU. mantiene bases militares en unos 80 países, cómo el dólar se consolidó como moneda de reserva a nivel global, y por qué el inglés es la lengua dominante en diplomacia y negocios.
Aunque China y Rusia poseen un considerable poderío militar y China es una fuerza económica de peso, su influencia global no se equipara a la de EE.UU. Esto se debe a que Estados Unidos ha actuado como una superpotencia que, a pesar de sus errores, ha mostrado generosidad histórica, reflejada en iniciativas como el Plan Marshall y el Plan de Emergencia para el Alivio del Sida (PEPFAR). Además, EE.UU. ha simbolizado la esperanza de libertad para muchos, al tiempo que ha respaldado normas e instituciones internacionales limitantes de su propio poderío.
Sin embargo, las medidas adoptadas por el presidente Donald Trump parecen estar desmantelando rápidamente este poder blando. La reciente disputa comercial con México y Canadá, la paralización de programas de ayuda extranjera y la decisión de deportar a refugiados venezolanos marcan un retroceso notable en la influencia benévola de Estados Unidos.
Confrontaciones económicas cuestionables
El consejo editorial del The Wall Street Journal ha calificado correctamente la disputa comercial con México y Canadá como "la guerra comercial más inútil de la historia".
Trump planeó implementar tarifas de 10% a productos chinos y del 25% a los provenientes de México y Canadá. Sus justificaciones, centradas en el control del flujo de inmigrantes y drogas, así como en el déficit comercial, parecen infundadas. El comercio entre estos países, que superó los 1,7 billones de dólares en 2022, resulta beneficioso para todos. Las restricciones de Trump podrían causar perturbaciones significativas en la industria automotriz de la región. Además, las acusaciones de que México y Canadá no hacen suficiente por controlar sus fronteras demuestran una falta de reconocimiento de las acciones ya tomadas por estos países y la limitada capacidad de EE.UU. para frenar el tráfico ilegal de armas hacia ellos.
La cifra de armas ilegales originarias de EE.UU. en Canadá exhibe la gravedad de este problema. A pesar de las críticas, la frontera EE.UU.-Canadá no muestra las amenazas que argumenta Trump, evidenciando lo innecesario de sus medidas de seguridad adicionales.
Ante tales acciones, el primer ministro canadiense, Justin Trudeau, expresó su desconcierto. A pesar del compromiso canadiense, demostrado en diversos conflictos bélicos junto a EE.UU., la relación entre estos vecinos sufre.
Paralelamente, con la suspensión temporal de la mayor parte de la ayuda internacional, Trump está decepcionando a millones que dependen de esta asistencia vital. La próxima desaparición de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), criticada injustamente, representa un golpe al poder blando estadounidense. Si bien ciertas ayudas requieren revisión, el ataque indiscriminado es indefendible.
Aunque algunas labores humanitarias continúan, las complejidades administrativas afectan la entrega efectiva de medicamentos y servicios cruciales, dejando a muchos sin la asistencia necesaria.
Implicaciones de un recorte
En diversos países, los impactos de estas decisiones ya se sienten. Sin fumigaciones ni distribución de medicamentos vitales, las vidas están en riesgo. El ahorro marginal comparado con el presupuesto federal es mínimo frente al costo humano y diplomático.
El retorno forzado de refugiados venezolanos, a pesar de anteriores declaraciones del propio Rubio sobre los riesgos que implica, suma otra capa de crueldad a estas políticas. El retroceso en la posición mundial de EE.UU. es palpable y parece inevitable si tales decisiones continúan.
Irónicamente, China podría ser la mayor ganadora de esta situación, llenando los vacíos dejados por el retiro estadounidense, lo que potencialmente minará la seguridad y prosperidad estadounidense a largo plazo.